En las impresionantes instalaciones diseñadas por Massimiliano y Doriana Fuksas, para la Rho Fiera Milano, centro de intercambio cultural, comercial y económico, se celebró de nuevo la feria más importante del sector del diseño e interiorismo: del martes 18 al domingo 23 de abril, 16 pabellones se abrieron al público para recibir la visita de más de 330,000 personas, más de 2 mil marcas y expositores.
En paralelo se celebró la Semana del Diseño de Milán, denominada Fuorisalone, un sistema de más de 400 eventos y exposiciones, que este año se denominó “Laboratorio Futuro” y que se lleva a cabo en toda la ciudad, la cual volvió a vivir una semana llena de muestra de diseño, arquitectura y arte.
El Salone retornó con gran éxito tras la pandemia y en sus fechas tradicionales, después que el año pasado se celebrara en el mes de junio, en un relanzamiento de la ciudad de Milano, de la economía de la ciudad y de Italia como un líder a nivel mundial, reconocido en el sector del diseño. Este año el tema fue: “¿A donde va el diseño?”, pensando en el futuro del hábitat, reflexionando y discutiendo sobre como viviremos en el futuro, con un carácter de laboratorio de ideas que se refleja en que muchas de las propuestas aún son prototipos experimentales.
En ese orden de ideas y con el Salone como epicentro, también se desarrolló el Salone Satélite, un espacio abierto no solo a los empresarios y comerciantes, si no también a los estudiantes y a los jóvenes talentos que se abren camino en este ámbito del diseño, un espacio gratuito y abierto a estudiantes de todo el mundo que discuten y reflexionan en mesas redondas, talleres y exposiciones sobre el futuro de los elementos de diseño, activando procesos creativos, artesanales e industriales, conscientes de la necesidad de consolidar la sostenibilidad, sobre todo en estos momentos de crísis económica, energética y ambiental.
Todo este ambiente para mostrar y celebrar la creatividad aplicada a solucionar las demandas de objetos útiles y estéticos, surge un 24 septiembre de 1961, cuando un pequeño grupo de fabricantes de muebles tienen la visionaria idea de mostrar los productos fabricados en Milano: cocinas modernas y salas con la televisión como nuevo miembro de la familia. Poco a poco la cambiante sociedad italiana fue asumiendo las novedades de la era moderna, que ya en ese tiempo imaginaba cómo sería la casa del futuro: el Salone del Mobile surge como una vitrina para mostrar los principales cambios en los patrones de conducta de una sociedad que asumía la modernidad en un escenario de bonanza económica, propiciada por la post guerra.
Maria Porro, presidente del Salone del Mobile 2023, expresa que este año se hizo especial énfasis en como la pandemia nos ha ensañado cuan importante son estos elementos, cuan importante es tener una casa acogedora, sin tensiones, donde vivimos pero también trabajamos, el home working o trabajo en casa es una realidad que llegó para quedarse. A partir de la pandemia surge también la necesidad de espacios abiertos de calidad, y la terraza, el patio son cada vez más necesarios. Evidenciando una vez más como arquitectura, diseño de interiores y objetos pueden aportar para afrontar los desafíos del mundo contemporáneo y propiciar las condiciones para una mejor calidad de vida.
Raúl Monterroso
Società Dante Alighieri
En las impresionantes instalaciones diseñadas por Massimiliano y Doriana Fuksas, para la Rho Fiera Milano, centro de intercambio cultural, comercial y económico, se celebró de nuevo la feria más importante del sector del diseño e interiorismo: del martes 18 al domingo 23 de abril, 16 pabellones se abrieron al público para recibir la visita de más de 330,000 personas, más de 2 mil marcas y expositores.
En paralelo se celebró la Semana del Diseño de Milán, denominada Fuorisalone, un sistema de más de 400 eventos y exposiciones, que este año se denominó “Laboratorio Futuro” y que se lleva a cabo en toda la ciudad, la cual volvió a vivir una semana llena de muestra de diseño, arquitectura y arte.
El Salone retornó con gran éxito tras la pandemia y en sus fechas tradicionales, después que el año pasado se celebrara en el mes de junio, en un relanzamiento de la ciudad de Milano, de la economía de la ciudad y de Italia como un líder a nivel mundial, reconocido en el sector del diseño. Este año el tema fue: “¿A donde va el diseño?”, pensando en el futuro del hábitat, reflexionando y discutiendo sobre como viviremos en el futuro, con un carácter de laboratorio de ideas que se refleja en que muchas de las propuestas aún son prototipos experimentales.
En ese orden de ideas y con el Salone como epicentro, también se desarrolló el Salone Satélite, un espacio abierto no solo a los empresarios y comerciantes, si no también a los estudiantes y a los jóvenes talentos que se abren camino en este ámbito del diseño, un espacio gratuito y abierto a estudiantes de todo el mundo que discuten y reflexionan en mesas redondas, talleres y exposiciones sobre el futuro de los elementos de diseño, activando procesos creativos, artesanales e industriales, conscientes de la necesidad de consolidar la sostenibilidad, sobre todo en estos momentos de crísis económica, energética y ambiental.
Todo este ambiente para mostrar y celebrar la creatividad aplicada a solucionar las demandas de objetos útiles y estéticos, surge un 24 septiembre de 1961, cuando un pequeño grupo de fabricantes de muebles tienen la visionaria idea de mostrar los productos fabricados en Milano: cocinas modernas y salas con la televisión como nuevo miembro de la familia. Poco a poco la cambiante sociedad italiana fue asumiendo las novedades de la era moderna, que ya en ese tiempo imaginaba cómo sería la casa del futuro: el Salone del Mobile surge como una vitrina para mostrar los principales cambios en los patrones de conducta de una sociedad que asumía la modernidad en un escenario de bonanza económica, propiciada por la post guerra.
Maria Porro, presidente del Salone del Mobile 2023, expresa que este año se hizo especial énfasis en como la pandemia nos ha ensañado cuan importante son estos elementos, cuan importante es tener una casa acogedora, sin tensiones, donde vivimos pero también trabajamos, el home working o trabajo en casa es una realidad que llegó para quedarse. A partir de la pandemia surge también la necesidad de espacios abiertos de calidad, y la terraza, el patio son cada vez más necesarios. Evidenciando una vez más como arquitectura, diseño de interiores y objetos pueden aportar para afrontar los desafíos del mundo contemporáneo y propiciar las condiciones para una mejor calidad de vida.
Raúl Monterroso
Società Dante Alighieri