En Turín, mayo es el mes del libro. El Salone Internazionale del Libro nació en 1988 y pronto se volvió el evento más importante de la edición en Italia y una de las ferias del libro más seguidas de Europa, después de la Frankfurter Buchmesse y la London Book Fair. El evento, que se lleva a cabo todos los años en el mes de mayo y durante cinco días, convoca en Turín a autores, escritores, editores, diseñadores del libro de todo el mundo, traductores, bibliotecarios, lectores o simples curiosos que llenan el enorme espacio dedicado a la cultura escrita.
Los impulsores de la iniciativa fueron el librero Angelo Pezzana y el empresario Guido Accornero, de la editorial Einaudi, y fue tan exitosa que el alcalde de Milán quería trasladar la feria a su ciudad, sin embargo, el Salón se confirmó oficialmente en el Lingotto Fiere de Turín, que es la sede desde 1992. El Lingotto es un lugar crucial en la historia industrial de Turín, un icono de la arquitectura industrial moderna y una de las primeras fábricas italianas fundadas en la organización científica del trabajo. Construida en los años 1915-1930 en cinco niveles y con una pista como techo que cubre todo el edificio para la prueba de los vehículos, la planta de FIAT Lingotto fue bombardeada varias veces durante el conflicto, ya que fue uno de los principales objetivos de la ofensiva aliada por haber contribuido sustancialmente a la producción de la guerra. Ahora Fiat ya no produce en Turín así que el edificio se volvió un centro multifuncional: centro comercial, hotel, sede universitaria, pinacoteca, sala de conciertos y salón de exposiciones.
Para regresar a los libros, a lo largo de los años, el Salón internacional ha ido aumentando el número de visitantes (215.000 este año) y de sus iniciativas. En 2005 nació el concurso literario nacional “Lingua Madre”, que se dirige a mujeres extranjeras que viven en Italia y quieren contar su historia de mujer y migrante. Un concurso de fotografía se añadió hace unos años y ahora acaba de nacer la revista online del concurso, un proyecto editorial que quiere ser un periódico semanal y proponer también podcast y audiocuentos.
En los cinco días del salón las actividades son muchísimas y seguro no da tiempo para seguirlas todas: presentación de libros, debates sobre temas de actualidad, entrevistas con personajes famosos o completamente desconocidos, radio en vivo, venta de libros y gadgets, lanzamiento de nuevos proyectos para fomentar la lectura en cada edad, talleres para alumnos y estudiantes. Toda la ciudad y hasta sus alrededores participan en el Salón Off: una serie de performances, espectáculos, conciertos y reading animan las calles y los parques porque la cultura y el arte van mas allá de la página escrita.
Con todo este énfasis en el libro, se preguntaría uno cuán importante es la lectura en Italia... Dejando de lado la lectura obligada por los estudios, que es responsable del estereotipo negativo según el cual el libro es algo aburrido e inútil, el55% de los italianos leen entre 1 y 3 libros cada año, 23% entre 4 y 6, solo 9% leen un promedio de 17 libros. En todo lado se multiplican las iniciativas para fomentar el interés y la buena práctica de la lectura. Se activan grupos de lectura y círculos literarios (nunca han visto la pelicula “El club de los poetas muertos”?). Sobre todo son importantes el ejemplo y la condivisión desde niños con los papas. En todo caso, las estadisticas raramente coinciden si no para lamentar la competencia agresiva de televisión, teléfono, computadora. Sin embargo, si la prensa sufre esta competencia y la venta de copias en papel disminuye sensiblemente, para los libros, los autores y títulos publicados aumentan. Es más fácil publicar o autopublicar, más difícil vender copias.
¿Los libros son caros? Talvez sí. Entonces allí también no faltan las ideas originales: a parte de las bibliotecas, se puede aprovechar el mercado del usado o crear una red de intercambio de libros que consiste en elegir un lugar físico o virtual donde compartir libros ya leídos dejándolos o recogiéndolos. E-book y audiolibros permiten llevarse una cantidad enorme de libros en bibliotecas virtuales personales siempre disponibles en un espacio muy reducido. Cierto, nada es como tener un libro entre sus dedos, cerrarlo un momento e imaginarse la cara del protagonista algùn lugar o marcar la página y subrayar las palabras que más nos tocan el corazón o son las mismas que hubiéramos elegido para comunicar nuestra rabia, nuestra emoción, nuestros sentimientos... Y lo sabe muy bien TikTok, que con un número increíble de followers de Bootok está relanzando la lectura con los adolescentes.
Lucia Bonato
En Turín, mayo es el mes del libro. El Salone Internazionale del Libro nació en 1988 y pronto se volvió el evento más importante de la edición en Italia y una de las ferias del libro más seguidas de Europa, después de la Frankfurter Buchmesse y la London Book Fair. El evento, que se lleva a cabo todos los años en el mes de mayo y durante cinco días, convoca en Turín a autores, escritores, editores, diseñadores del libro de todo el mundo, traductores, bibliotecarios, lectores o simples curiosos que llenan el enorme espacio dedicado a la cultura escrita.
Los impulsores de la iniciativa fueron el librero Angelo Pezzana y el empresario Guido Accornero, de la editorial Einaudi, y fue tan exitosa que el alcalde de Milán quería trasladar la feria a su ciudad, sin embargo, el Salón se confirmó oficialmente en el Lingotto Fiere de Turín, que es la sede desde 1992. El Lingotto es un lugar crucial en la historia industrial de Turín, un icono de la arquitectura industrial moderna y una de las primeras fábricas italianas fundadas en la organización científica del trabajo. Construida en los años 1915-1930 en cinco niveles y con una pista como techo que cubre todo el edificio para la prueba de los vehículos, la planta de FIAT Lingotto fue bombardeada varias veces durante el conflicto, ya que fue uno de los principales objetivos de la ofensiva aliada por haber contribuido sustancialmente a la producción de la guerra. Ahora Fiat ya no produce en Turín así que el edificio se volvió un centro multifuncional: centro comercial, hotel, sede universitaria, pinacoteca, sala de conciertos y salón de exposiciones.
Para regresar a los libros, a lo largo de los años, el Salón internacional ha ido aumentando el número de visitantes (215.000 este año) y de sus iniciativas. En 2005 nació el concurso literario nacional “Lingua Madre”, que se dirige a mujeres extranjeras que viven en Italia y quieren contar su historia de mujer y migrante. Un concurso de fotografía se añadió hace unos años y ahora acaba de nacer la revista online del concurso, un proyecto editorial que quiere ser un periódico semanal y proponer también podcast y audiocuentos.
En los cinco días del salón las actividades son muchísimas y seguro no da tiempo para seguirlas todas: presentación de libros, debates sobre temas de actualidad, entrevistas con personajes famosos o completamente desconocidos, radio en vivo, venta de libros y gadgets, lanzamiento de nuevos proyectos para fomentar la lectura en cada edad, talleres para alumnos y estudiantes. Toda la ciudad y hasta sus alrededores participan en el Salón Off: una serie de performances, espectáculos, conciertos y reading animan las calles y los parques porque la cultura y el arte van mas allá de la página escrita.
Con todo este énfasis en el libro, se preguntaría uno cuán importante es la lectura en Italia... Dejando de lado la lectura obligada por los estudios, que es responsable del estereotipo negativo según el cual el libro es algo aburrido e inútil, el55% de los italianos leen entre 1 y 3 libros cada año, 23% entre 4 y 6, solo 9% leen un promedio de 17 libros. En todo lado se multiplican las iniciativas para fomentar el interés y la buena práctica de la lectura. Se activan grupos de lectura y círculos literarios (nunca han visto la pelicula “El club de los poetas muertos”?). Sobre todo son importantes el ejemplo y la condivisión desde niños con los papas. En todo caso, las estadisticas raramente coinciden si no para lamentar la competencia agresiva de televisión, teléfono, computadora. Sin embargo, si la prensa sufre esta competencia y la venta de copias en papel disminuye sensiblemente, para los libros, los autores y títulos publicados aumentan. Es más fácil publicar o autopublicar, más difícil vender copias.
¿Los libros son caros? Talvez sí. Entonces allí también no faltan las ideas originales: a parte de las bibliotecas, se puede aprovechar el mercado del usado o crear una red de intercambio de libros que consiste en elegir un lugar físico o virtual donde compartir libros ya leídos dejándolos o recogiéndolos. E-book y audiolibros permiten llevarse una cantidad enorme de libros en bibliotecas virtuales personales siempre disponibles en un espacio muy reducido. Cierto, nada es como tener un libro entre sus dedos, cerrarlo un momento e imaginarse la cara del protagonista algùn lugar o marcar la página y subrayar las palabras que más nos tocan el corazón o son las mismas que hubiéramos elegido para comunicar nuestra rabia, nuestra emoción, nuestros sentimientos... Y lo sabe muy bien TikTok, que con un número increíble de followers de Bootok está relanzando la lectura con los adolescentes.
Lucia Bonato